A pesar de la torrencial lluvia que se desató durante este evento, la Marcha Mundial fue presentada en una cálida atmósfera y contó con la participación de grupos culturales locales.
El acto contó con la presencia de la Dra. Lizbeth Quesada, Defensora Pública, Martín Callisaya, Embajador Boliviano en Costa Rica, Francisco Cordero de Centro de Amigos por la Paz, Diego Ugarte de Mundo Sin Guerras y Jorge R. Quesada, portavoz del Movimiento Humanista en Costa Rica. El evento fue cubierto por dos medios de comunicación.
Costa Rica es un ejemplo de cómo los objetivos de la Marcha Mundial pueden volverse realidad. El 1 de Diciembre de 1948, el Presidente José Figueres Ferrer, luego de la victoria en la guerra civil, abolió la existencia del ejército. En una ceremonia en el Cuartel Bellavista, Figueres rompió un muro con un mazo simbolizando el fin del espíritu militar costarricense. En 1949, esta prohibición fue introducida en el artículo 12 de la Constitución de ese país.
El presupuesto que antes se destinaba con fines militares, ahora se utiliza en seguridad, educación y cultura. El país sí tiene un cuerpo de policía.
Contrariamente a sus vecinos, Costa Rica no ha sufrido ninguna guerra civil desde 1948.
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